¡Increíble Descubrimiento! Pozos de 3600 Años Llenos de Manos Gigantes Encontrados en Egipto: Los Arqueólogos No Pueden Creer lo que Han Hallado

July 30, 2024

El otoño de 2011 marcó un importante avance arqueológico en la historia antigua. Un equipo de arqueólogos que trabajaba en el palacio de la antigua Avaris hizo un descubrimiento sorprendente: los restos de 16 manos humanas enterradas en cuatro tumbas separadas dentro del recinto del palacio. Este fascinante hallazgo ha abierto un nuevo capítulo en nuestra comprensión de los rituales del antiguo Egipto y el período hicso.

Descubrimiento y análisis inicial

Arqueólogos descubren en Egipto pozos de 3.600 años de antigüedad llenos de manos gigantes. - VC Una mano derecha cortada descubierta frente a un palacio hicso en Avaris (actual Tell el-Daba). Habría sido cortado y presentado al rey (o a un subordinado) a cambio de oro. Esta es la primera evidencia arqueológica de esta práctica. Fueron enterrados hace unos 3.600 años, cuando el rey Khayan utilizaba el palacio.

El sitio del descubrimiento, ubicado en lo que se cree que es el complejo Hyksos, incluía cuatro pozos con manos humanas. Dos fosos, ubicados directamente frente a la sala del trono, cada uno contenía una sola mano. Las 14 manos restantes fueron encontradas en dos fosas fuera del palacio. Al examinar los restos, los arqueólogos concluyeron que los huesos datan de aproximadamente 3.600 años, lo que sugiere una línea de tiempo común y potencialmente una ceremonia única.

Implicaciones rituales

Arqueólogos descubren en Egipto pozos de 3.600 años de antigüedad llenos de manos gigantes. - VC Restos de una mano gigante descubiertos en Egipto.

Manfred Bietak, el arqueólogo austriaco que dirigió la excavación, reveló al periódico Egypt Archaeology que estas manos respaldan narrativas y representaciones artísticas del antiguo Egipto en las que los soldados cortaban la mano derecha de sus enemigos a cambio de oro. Esta práctica, más allá de sus recompensas tangibles, simbolizaba la eliminación del poder de un enemigo, extendiéndose posiblemente al reino sobrenatural cuando se realizaba dentro de un espacio sagrado.

Bietak explicó: “Lo privas de su poder para siempre. Nuestro hallazgo es la primera y única evidencia física. Cada foso representa una ceremonia diferente”. Este descubrimiento sirve como un testimonio físico único de los rituales de guerra del antiguo Egipto y sus ceremonias asociadas.

El contexto de las manos

Arqueólogos descubren en Egipto pozos de 3.600 años de antigüedad llenos de manos gigantes. - VC Restos de una mano gigante descubiertos en Egipto.

Si bien la identidad precisa de los individuos a quienes pertenecían las manos aún no está clara, su tamaño anormal sugiere un significado selectivo. Aún no se ha determinado si estas manos eran de egipcios o de los hicsos, un pueblo asiático que una vez controló partes de Egipto. La colocación de las manos, particularmente las que están frente a la sala del trono, sugiere un profundo significado ritual, potencialmente vinculado a una demostración de poder o una súplica a los dioses durante tiempos tumultuosos.

Conexiones históricas y culturales

Esta práctica de separación de manos y sus entierros rituales puede verse como parte de un contexto cultural y religioso más amplio en el antiguo Egipto, especialmente en áreas sujetas a invasiones extranjeras. Los egipcios a menudo invocaban a sus deidades para maldecir a los invasores con plagas o hambrunas. Estos sacrificios de manos podrían haber sido pensados como potentes maldiciones contra las fuerzas ocupantes, reforzando la creencia en la retribución divina.

Arqueólogos descubren en Egipto pozos de 3.600 años de antigüedad llenos de manos gigantes. - VC Esta imagen fue creada unos 400 años después de que se depositaran las manos de Avaris. Muestra las manos cortadas de soldados enemigos que se preparan para Ramsés III, un faraón de Egipto, después de una campaña exitosa.

Además, la separación de las dos manos individuales podría indicar ofrendas especiales para apaciguar a los dioses, lo que podría alinearse con las teorías sobre la civilización hiperbórea. Esta antigua cultura, descrita en varios textos antiguos, supuestamente estaba formada por personas excepcionalmente grandes. Las manos de gran tamaño encontradas en Avaris podrían sugerir conexiones con estas narrativas míticas, añadiendo otra capa de intriga al descubrimiento.

El descubrimiento de las 16 manos cortadas en la antigua Avaris proporciona una rara visión de las prácticas ceremoniales del antiguo Egipto, particularmente durante el período hicso. Si bien queda mucho por explorar, este hallazgo desafía nuestra comprensión convencional de los rituales antiguos y abre posibilidades para nuevas interpretaciones históricas. La presencia de estas manos, su tamaño anormal y su entierro ceremonial aluden a una compleja interacción de poder, religión y guerra que definió la época. A medida que continúen las investigaciones, podremos descubrir más sobre las personas detrás de estas manos y el verdadero alcance de su importancia en la sociedad del antiguo Egipto.