La Máquina de Antikythera: El Primer Ordenador Analógico de la Historia de Hace 2.000 Años que Sorprendió a la Ciencia

December 13, 2024

En abril de 1901, mientras exploraban un naufragio bajo el mar cerca de la isla de Antikythera, en Grecia, un grupo de buceadores encontró un objeto extraño entre los restos sumergidos cerca de un arrecife. Al principio, los fragmentos de metal oxidado y amalgamado parecían pertenecer a un artefacto común. Sin embargo, cuando se analizaron en el Museo Nacional de Arqueología de Grecia, los investigadores se dieron cuenta de que estaban ante un invento que superaba ampliamente su época.

La Máquina de Antikythera, como se la conoce ahora, es un dispositivo mecánico complejo, de un tamaño comparable al de un ordenador portátil promedio, fabricado con bronce y engranajes elaborados con gran precisión. El dispositivo cuenta con más de 30 engranajes, cada uno diseñado con una exactitud asombrosa, y estaba concebido para modelar los movimientos de los planetas, la Luna y el Sol. Este aparato se considera el primer ordenador analógico del mundo, planteando grandes interrogantes sobre el nivel tecnológico alcanzado por los antiguos griegos.

En sus primeros estudios, los científicos no pudieron formular hipótesis claras sobre la función del artefacto. Sin embargo, las primeras evidencias extraídas de los engranajes y las inscripciones en su superficie metálica sugerían un dispositivo destinado a rastrear eventos astronómicos. En 1959, el historiador de la ciencia Derek de Solla Price realizó un estudio detallado y confirmó que la Máquina de Antikythera estaba diseñada para calcular y predecir eclipses solares y lunares, así como otros ciclos astronómicos. Existen textos antiguos que también documentan la existencia de dispositivos similares durante la época de Arquímedes.

Recientemente, gracias a tecnologías avanzadas de rayos X y reconstrucción digital, los científicos han podido desvelar con más detalle la estructura y las funciones de la máquina. Los estudios han demostrado que el aparato podía seguir con precisión los movimientos de cinco planetas y mostrar información en un panel con marcadores detallados.

Hoy en día, los científicos continúan excavando y estudiando la zona cercana a la isla de Antikythera con el objetivo de encontrar más evidencias relacionadas. Los datos recopilados se comparan con documentos históricos y estudios modernos para confirmar que la tecnología de la antigua Grecia superó con creces las expectativas tradicionales.