Pinturas rupestres aborígenes de 4.000 años de antigüedad en Australia: ¿podrían realmente representar extraterrestres?

January 10, 2025

Los Wandjinas, figuras misteriosas del arte rupestre aborigen australiano, tienen rostros blancos, ojos negros y halos que intrigan a expertos. ¿Eran dioses, guardianes espirituales o visitantes de otros mundos? Estas pinturas de 4.000 años plantean preguntas sobre el pasado y su conexión con mitologías globales. ¿Por qué no tienen boca? ¿Qué significado ocultan sus símbolos y formas? Mientras algunos sugieren un origen extraterrestre, los aborígenes ven en ellos espíritus ancestrales sagrados. ¿Qué secretos aún guardan estas figuras enigmáticas?

Si le intrigan los misterios y leyendas antiguos, es posible que haya oído hablar de los Wandjinas, los dioses supremos y creadores de la tierra y la humanidad en la mitología aborigen australiana. Las wandjinas están representadas en algunos de los arte rupestres más antiguos y cautivadores encontrados en Australia, particularmente en la región de Kimberley en Australia Occidental.

Los Wandjinas también son conocidos como Gulingi por el pueblo Wunambal de la región de Mitchell Plateau. Se cree que son espíritus de las nubes y la lluvia que descendieron de la Vía Láctea durante el Tiempo del Sueño (el período de creación aborigen) para crear la Tierra y todos sus habitantes. También enseñaron a los aborígenes leyes, costumbres, rituales y cómo vivir en armonía con la naturaleza. Las wandjinas están asociadas con el agua, la fertilidad y el poder y se dice que castigan a los infractores de la ley con inundaciones, rayos y ciclones.

Arte rupestre aborigen australiano

Estas imágenes han circulado ampliamente en las redes sociales y sitios web de conspiración, con afirmaciones de que las pinturas rupestres aborígenes de 5.000 años (en realidad, 4.000 años) representan extraterrestres. ¿Pero lo hacen?

El arte rupestre de Wandjina data de hace aproximadamente 4.000 años y fue creado después de una sequía milenaria que terminó con la llegada de un clima más húmedo caracterizado por frecuentes monzones. Las pinturas se encuentran en rocas y cuevas en toda la región de Kimberley y todavía son consideradas sagradas por los pueblos Worrorra, Ngarinyin y Wunambal, que son los custodios de la tierra. Las pinturas son renovadas periódicamente por artistas aborígenes como una forma de renovar la energía espiritual de los Wandjinas.

Las pinturas presentan distintos estilos y características. A menudo representan grandes partes superiores del cuerpo y cabezas con grandes ojos negros y lo que parece ser un halo o casco que rodea sus cabezas. Las figuras carecen de boca, lo que la tradición local explica de dos maneras: o los Wandjinas eran tan poderosos que no necesitaban hablar, o si tenían boca, la lluvia nunca pararía. Las pinturas también incluyen símbolos y objetos asociados con los Wandjinas, como la Serpiente Arcoíris, bumeranes y hachas de piedra.

Interpretaciones y especulaciones

El arte rupestre de Wandjina ha suscitado diversas interpretaciones y especulaciones. Algunos ven las figuras como representaciones estilizadas de humanos o animales (como los búhos), mientras que otros las ven como símbolos de poder y autoridad espiritual. Sin embargo, algunos especulan que las figuras podrían representar seres extraterrestres.

Los rostros blancos, los grandes ojos negros y las narices alargadas de los Wandjinas han llevado a algunos a establecer paralelismos con representaciones de extraterrestres. Algunos han interpretado el halo o casco alrededor de sus cabezas como evidencia de tecnología o conocimiento avanzado, lo que sugiere que los extraterrestres pueden haber desempeñado un papel activo en la creación, un concepto que se hace eco no solo en las historias aborígenes del Dreamtime sino también en mitos de todo el mundo.

Wandjinas en las historias de creación aborigen

En la tradición aborigen, los Wandjinas son “seres del cielo” o “espíritus de las nubes” que descendieron de la Vía Láctea durante el Tiempo del Sueño para dar forma a la Tierra y a sus habitantes. Al darse cuenta de la enormidad de su tarea, regresaron a casa para traer más Wandjinas. Con la ayuda de la serpiente del Tiempo del Sueño, descendieron de nuevo y pasaron su tiempo como creadores, maestros y dioses de los aborígenes que habían creado.

Finalmente, los Wandjina desaparecieron, retirándose bajo tierra y residiendo debajo de fuentes de agua vinculadas a cada pintura. Allí continúan creando nuevas “semillas infantiles”, consideradas el origen de toda la vida humana.

Preguntas sin respuesta

Surgen muchas preguntas, como por qué los Wandjinas son representados con la piel blanca cuando los aborígenes tienen la piel más oscura. También está el tamaño desproporcionado de sus ojos en relación con sus caras y narices, así como la constante ausencia de boca.

Si bien el parecido entre los Wandjinas y las representaciones típicas de extraterrestres en el arte, las películas y los relatos de testigos presenciales es sorprendente, no hay evidencia concreta que respalde la hipótesis alienígena. Sugerir esto podría incluso ser una falta de respeto hacia los aborígenes australianos, que consideran a los Wandjinas como espíritus ancestrales sagrados.

Un testamento a la cultura aborigen

Independientemente de la verdad, el arte rupestre de Wandjina sigue siendo un testimonio notable de la rica y compleja cultura e historia del pueblo aborigen. Refleja su profunda conexión con la tierra, sus antepasados ​​y su espiritualidad. Estas obras de arte también nos desafían a ampliar nuestras perspectivas y cuestionar nuestras suposiciones sobre el pasado, el presente y el futuro de la humanidad.